Estos últimos días se ha montado
un revuelo enorme en toda la Península (prensa, radios, televisiones, redes
sociales, etc.) debido a la visita que nos está haciendo un curioso grupo de viajantes
en ruta.
Autographa gamma
Cuando digo curioso, lo digo por
su indumentaria, un traje de color gris-parduzco decorado con una llamativa mancha
blanca en cada una de sus alas con forma de letra griega, lambda para unos y gamma
para otros, siendo esta última letra la que además, y por tal motivo, le da
nombre a la especie: Autographa gamma
(Linnaeus, 1758).
Hay quien ve una lambda y hay quien ve una gamma ...
Lo llamativo de esta visita (inesperada
para unos y no tanto para otros) y por lo que se ha convertido en noticia, es
por el número de individuos que integran la expedición. No cientos, tampoco miles,
si no millones de ejemplares, debido
seguramente a la primavera fría y tan lluviosa que hemos sufrido este año, y que ha desembocado en una gran “explosión” de vegetación
en los campos, y que unido a otras serie de circunstancias ha contribuido sin duda a la
explosión demográfica de esta temporada.
El fenómeno no es nuevo, ni mucho
menos. Similares visitas de individuos de esta especie a nuestro territorio
tuvieron lugar a principios de los años 60, a mediados de los 90 ( 1995 y 1996),
y más recientemente en el año 2006.
La Autographa gamma es una
mariposa nocturna de unos 4 cm de envergadura alar perteneciente a la familia
Noctuidae. Coloniza lugares entre los 0 y los 2.000 m de altitud. Como imago, presenta
hábitos de vuelo tanto diurnos como nocturnos, mientras que como oruga, su
actividad fitófaga se produce fundamentalmente por las noches.
La Autographa gamma en reposo
Estas mariposas,
comienzan su migración en tierras africanas, penetrando en Europa por el sur
peninsular a partir de los meses de marzo/abril. Poco a poco van colonizando el
continente alcanzando incluso la tercera o cuarta generación las tierras escandinavas. Llegado el otoño, la última generación es la encargada de
regresar a África, a aquellos lugares de los que partieron inicialmente para completar
el ciclo migratorio (tal y como hace la diurna Vanessa cardui).
Sobra decir que son seres
inofensivos para el hombre. Aunque lo habitual es que las orugas de las
mariposas se alimenten de una o pocas especies de plantas, en el caso de la
Autographa gamma esta regla no se cumple. Baste decir que en pruebas de tipo
experimental se ha conseguido criar esta mariposa con mas de 200 especies de plantas
pertenecientes a más de 50 familias diferentes (Mariposas / Ivo Novák, 1986).
Aunque
también lo hacen de tréboles, ortigas y otras especies sin interés económico,
el problema viene cuando las insaciables y verduzcas orugas se alimentan de
otras que si lo tienen, como por ejemplo las plantas del guisante, las coles,
las lechugas, etc., con las negativas consecuencias de tipo económico que ello
puede ocasionar.
De adultos, cuando han completado
por fin la metamorfosis y ya tienen aspecto de mariposa, dejan de alimentarse
con fines de crecimiento, y simplemente se dedican a libar néctar en las flores
para conseguir el aporte energético suficiente que les facilite las labores del
vuelo.
La mariposa libando néctar
Volviendo al tema que señalábamos
en un principio, considero del todo exagerado el revuelo que se ha formado
alrededor de todo este tema durante los últimos días. Para muestra, cuatro
botones en forma de titulares:
- “Una plaga de polillas gigantes invade Madrid”
- “Invasión de polillas en Madrid”
- “Alerta ante una posible plaga de polillas africanas”
- “Madrid, Salamanca y Ciudad Real sufren una invasión de polillas gigantes”
(…)
¿gigantes?!! … alerta ¿?!! … sensacionalismos que contribuyen a crear
confusión…
Seguramente todo esto sea fruto del desconocimiento generalizado que presenta
la población en lo relativo a la vida de los insectos, sus costumbres, etc., y es que, su pequeño tamaño, las fobias, y las tan temidas
picaduras y alergias que en ocasiones pueden llegar a producir estos seres
diminutos (hablo de los insectos en general), pueden ser los motivos en los que se enraíce este
desconocimiento.
El Noctuido descansa ...
Tampoco hasta la fecha los medios
de comunicación han contribuido mucho a promover el conocimiento de los mismos.
Todos hemos visto y disfrutado de los maravillosos reportajes de los grandes
(en tamaño) protagonistas de fauna continental y oceánica … Gracias a ellos,
mucha gente conoce con detalle la vida de los elefantes, de los leones de la
sabana, de las jirafas o de los orangutanes… , animales que problamente nunca
haya visto de frente (si acaso en un zoo). Sin embargo (aunque la tendencia es verdad que está cambiando
y se empiezan a ver cada vez más), pocos son todavía los reportajes que nos
muestran los detalles de la vida de estos pequeños pero interesantes seres...
No quisiera finalizar sin un
apunte final en lo relativo a los motivos visuales, ya sean videos, dibujos o
fotografías que suelen acompañar a las noticias de este tipo. Y es que en
muchas ocasiones, en vez de informar creo que llegan a producir el efecto
inverso, y “desinforman” (si se puede
utilizar esta palabra), ya que no son pocos los casos en los que la especie del
vídeo, dibujo, o fotografía que acompaña las noticias, nada tiene que ver con la
protagonista de las mismas…
La mariposa nocturna que nos ocupa, en otra pose ...
A modo de despedida, se me
presenta una duda … ¿y si todo esto no fuera más que una gran campaña de
marketing por parte de los grandes organismos internacionales tras las últimas recomendaciones
sobre los beneficios que conlleva la dieta de insectos? …
Muchas gracias por toda esta información. Decir que donde yo he estado haciendo fotos en Valladolid había miles.........Todo un espectáculo en el aire.
ResponderEliminarLa verdad es que si que lo tiene que ser Guillermo!. Muchas gracias por tus comentarios!
EliminarY este principio de Mayo de 2015, nos ha tocado especialmente al sur de la península! Realmente provechosa la lectura de tu artículo! Muchas gracias!
ResponderEliminarSi, por el norte también se están viendo bastantes estos últimos días...
Eliminar